La piedra Labradorita es altamente mística y protectora, una gran portadora de luz. Eleva la conciencia y conecta con las energías universales. Esta piedra desvía las fuerzas indeseadas del aura e impide las fugas energéticas.
Puede llevarte a otros mundos o a otras vidas, siendo una piedra de sabiduría esotérica que facilita la iniciación a los misterios.
La labradorita alinea los cuerpos físico y etérico, y permite acceder al propósito espiritual. Esta piedra iridiscente tiene una magia que hipnotiza, con solo mirarla nos trasporta a un estado de paz interior. Tiene la capacidad de estimular la intuición y los dones psíquicos.
Calma la mente hiperactiva y energiza la imaginación, haciendo que surjan nuevas ideas. Permite sintetizar el pensamiento intelectual con la sabiduría intuitiva.
La labradorita disipa los miedos y las inseguridades, fortalece la fe en el yo y la confianza en el universo.
Al estar en bruto (como las encontramos en la naturaleza) su brillo iridisente está más oculto. Moviendo la piedra y estudiandola con detalle podemos encontrar esos destellos.
$3.100,00
20% de descuento pagando por transferencia bancaria
La piedra Labradorita es altamente mística y protectora, una gran portadora de luz. Eleva la conciencia y conecta con las energías universales. Esta piedra desvía las fuerzas indeseadas del aura e impide las fugas energéticas.
Puede llevarte a otros mundos o a otras vidas, siendo una piedra de sabiduría esotérica que facilita la iniciación a los misterios.
La labradorita alinea los cuerpos físico y etérico, y permite acceder al propósito espiritual. Esta piedra iridiscente tiene una magia que hipnotiza, con solo mirarla nos trasporta a un estado de paz interior. Tiene la capacidad de estimular la intuición y los dones psíquicos.
Calma la mente hiperactiva y energiza la imaginación, haciendo que surjan nuevas ideas. Permite sintetizar el pensamiento intelectual con la sabiduría intuitiva.
La labradorita disipa los miedos y las inseguridades, fortalece la fe en el yo y la confianza en el universo.
Al estar en bruto (como las encontramos en la naturaleza) su brillo iridisente está más oculto. Moviendo la piedra y estudiandola con detalle podemos encontrar esos destellos.